La Muerte del troglodita
“Unos trabajan de trueno
y es para otros la llovida” (Atahualpa Yupanqui)
y es para otros la llovida” (Atahualpa Yupanqui)
Un idiota vendería
la biblioteca. Se me podía considerar una cucaracha en medio de la ciudad insecticida .Pero vender los
libros me parecía demasiado. No eso si que no, prefería cualquier cosa antes
que eso pase!. Incluso morir de hambre, como cesar Vallejo. Confieso que uno empieza
en este oficio de una manera muy simple. Ya era como el séptimo trabajo
por el que deambulaba ese año. Conseguir
un trabajo malo no es algo tan difícil en este lugar. La cosa es más o menos así. Un encargado que se cree importante y que
se tiene por alguien superior al resto de los mortales , te llama por
teléfono , con un tono de voz tan humillante que hubieras preferido que no pasara nunca .Luego
de las presentaciones de rigor te
pregunta si te interesa trabajar por 50 pesos (25 , 10 , 7 .50 , etc.) la hora .Y Vos lo pensas un poco , sabiendo que en el fondo te conviene seguir
durmiendo hasta las 12 del mediodía . Pero terminas
aceptando. Terminas aceptando perder tu
tiempo en uno de esos lugares que te destrozan el alma, MUY LEN-TA-MEN-TE .
Ya en la entrevista laboral, el troglodita que será tu encargado te mide como si fueras una media res que esta a punto de entrar al frigorífico para ser descuartizada, y decide si te acepta o no . Esa vez quede y la verdad no sabia si reír o llorar, era como estar a pasos del patíbulo. La última jornada laboral de mi vida fue en un cálido día de agosto, yo me había despertado sintiendo que el hígado se me salía por la boca y eso claramente no era una buena señal. Ya me habían avisado que acostarse tomando whiscola no era una buena combinación, para alguien que quisiera conservar su puestito laboral dignamente.
A duras penas logre pararme sobre un pie, aunque la nausea se apoderara de mi estomago y me subiera un mareo espantoso, desde la garganta hasta la cabeza .Reuniendo lo que me quedaba de fuerza logre apoyarme en la ventana y pude ver lo que pasaba a mi alrededor, a pesar de la resaca porcina que lo invadía todo. Pude contemplar a través de la ventana, el ajetreo inútil con que se agitan los autos para pasarse los unos a los otros, como si estuvieran en una carrera estúpida. Las caras rígidas de sus conductores mientras se profesan un odio inútil con tal de llegar primeros y las eternas amenazas de muerte entre ellos .Observe fascinado a los pájaros en su vuelo rasante, verdaderos héroes. Sobrevivientes de esta meseta huraña a la que nos hemos acostumbrado. Los cartoneros seguían haciendo cola frente al fuego para tomarse un trago de vino antes de seguir su rumbo, mientras las viejas octogenarias clamaban por la aniquilación de todo lo que oliera a vida.
Ya en la entrevista laboral, el troglodita que será tu encargado te mide como si fueras una media res que esta a punto de entrar al frigorífico para ser descuartizada, y decide si te acepta o no . Esa vez quede y la verdad no sabia si reír o llorar, era como estar a pasos del patíbulo. La última jornada laboral de mi vida fue en un cálido día de agosto, yo me había despertado sintiendo que el hígado se me salía por la boca y eso claramente no era una buena señal. Ya me habían avisado que acostarse tomando whiscola no era una buena combinación, para alguien que quisiera conservar su puestito laboral dignamente.
A duras penas logre pararme sobre un pie, aunque la nausea se apoderara de mi estomago y me subiera un mareo espantoso, desde la garganta hasta la cabeza .Reuniendo lo que me quedaba de fuerza logre apoyarme en la ventana y pude ver lo que pasaba a mi alrededor, a pesar de la resaca porcina que lo invadía todo. Pude contemplar a través de la ventana, el ajetreo inútil con que se agitan los autos para pasarse los unos a los otros, como si estuvieran en una carrera estúpida. Las caras rígidas de sus conductores mientras se profesan un odio inútil con tal de llegar primeros y las eternas amenazas de muerte entre ellos .Observe fascinado a los pájaros en su vuelo rasante, verdaderos héroes. Sobrevivientes de esta meseta huraña a la que nos hemos acostumbrado. Los cartoneros seguían haciendo cola frente al fuego para tomarse un trago de vino antes de seguir su rumbo, mientras las viejas octogenarias clamaban por la aniquilación de todo lo que oliera a vida.
Lo vi todo en un
segundo y no quise mirar más, cerré la ventana con una resignación suave y violenta.
Cuando al fin pude incorporarme, entendí que tenía que salvar mi odiosa
trinchera de combate donde me ganaba lo
mínimo para seguir existiendo. Me abalance hacia el baño, me mire al espejo y
pude ver mi rostro aullando su final anunciado, triste y odioso final que me
esperaba si no les ganaba a ellos .Por
que así funciona esto, o los mandamos por el inodoro de la historia a todos
estos mercanchifles de almas que nos roban el aire y el tiempo o seguiremos mordiendo el polvo cada uno de
nuestros días, hasta que la salida
sea mirar el techo desde un cajón de
madera o una gran bola incandescente se
lo trague todo de una buena vez , lo que
pase primero.
Volvamos al asunto! , llegue, fiche , entre (todo en ese orden) .Rondaba la calma en los alrededores del viejo restaurante ( en comparación con otros oficios, uno puede ser bachero por años..). Quise desentenderme de mi llegada tarde poniéndome a trabajar rápidamente, pero!, Para mi desgracia llego el .El bendito encargado, el infame troglodita con cara de gurka. Me pregunto con cara de desentendido y dándose aires de superioridad. Llego tarde señor Pirez?, yo solo atine a mirar el piso mientras me hablaba, usted sabe lo que eso significa no señor Pirez?, es algo gravísimo, llego muy tarde .En principio le voy advirtiendo que si sigue con este tipo de conductas vamos a tener que prescindir de sus servicios me entendió?. Por ahora solo le vamos a descontar la mitad del día y va a tener que trabajar 2 horas de mas como castigo! , diciéndolo todo con un aire odioso de ejecutivo ingles .Entiéndalo! no podemos tolerar en este negocio brotes de indisciplina laboral, no es nada personal amigo, mientras encendía un cigarrillo y esbozaba una media sonrisa que buscaba ser cómplice y para mal suyo me palmeo la espalda queriéndose mostrar comprensivo.
Mi cabeza estallaba en una rabia odiosa, si hoy lo pienso bien quizás no hubiera reaccionado de una manera tan explosiva, pero en ese momento una fuerza sobrenatural guio mi mano y todo funciono como un mecanismo perfecto. Puse el pelapapas en su cuello y le dije con voz grave y calma, los que me van a tener que dar todo lo de caja son ustedes pedazo de sorete, ahora vas a ver lo que es bueno soberano hijo de mil puta .
El troglodita lloraba como un bebe, mientras me rogaba que no lo mate que tenia hijos y que el no decidía ese tipo de cosas, que el era otro empleado mas que no iba a decirle nada al patrón y que dejaría irme en paz. Empezó a pedir auxilio a los otros empleados de la cocina, pero pasada la sorpresa inicial, todos entendieron lo que iba a pasar y ninguno acudió en su ayuda .Miraron la escena con aprobación silenciosa, mientras el fulano se desgranaba en puteadas y llantos .
Fuimos juntos hasta la caja, yo seguía sosteniendo el pelapapas en su cuello y el imbécil ya estaba orando un padre nuestro. Al llegar allí la cajera se sorprendió, pero al momento me pregunto. Estas seguro de lo que vas a hacer nene? , así es señora le conteste y me lleve10.000 mangos íntegros .
Ahora te toca a vos ruiseñor, le dije al encargado de cocina. Su cuerpo temblaba tanto que parecía que se derretía de miedo, mi corazón era una explosión constante, lo di vuelta lentamente. Juro que nada fue premeditado pero que nada a su vez fue irracional, simplemente fue como si algo ya estuviera inscripto en mi naturaleza, esperando a ser activado. No quiso abrir los ojos cuando aprisione el pelapapas en su pecho.
Desde ese momento no volví nunca más sobre mis pasos. Me cobije en la noche, me transforme en el otro, en el ser más despreciable de la tierra .Aquel cuyo nombre nunca debe ser pronunciado a la luz de los días. Pero esa vez, aunque sea esa única vez, les había ganado la partida…
Volvamos al asunto! , llegue, fiche , entre (todo en ese orden) .Rondaba la calma en los alrededores del viejo restaurante ( en comparación con otros oficios, uno puede ser bachero por años..). Quise desentenderme de mi llegada tarde poniéndome a trabajar rápidamente, pero!, Para mi desgracia llego el .El bendito encargado, el infame troglodita con cara de gurka. Me pregunto con cara de desentendido y dándose aires de superioridad. Llego tarde señor Pirez?, yo solo atine a mirar el piso mientras me hablaba, usted sabe lo que eso significa no señor Pirez?, es algo gravísimo, llego muy tarde .En principio le voy advirtiendo que si sigue con este tipo de conductas vamos a tener que prescindir de sus servicios me entendió?. Por ahora solo le vamos a descontar la mitad del día y va a tener que trabajar 2 horas de mas como castigo! , diciéndolo todo con un aire odioso de ejecutivo ingles .Entiéndalo! no podemos tolerar en este negocio brotes de indisciplina laboral, no es nada personal amigo, mientras encendía un cigarrillo y esbozaba una media sonrisa que buscaba ser cómplice y para mal suyo me palmeo la espalda queriéndose mostrar comprensivo.
Mi cabeza estallaba en una rabia odiosa, si hoy lo pienso bien quizás no hubiera reaccionado de una manera tan explosiva, pero en ese momento una fuerza sobrenatural guio mi mano y todo funciono como un mecanismo perfecto. Puse el pelapapas en su cuello y le dije con voz grave y calma, los que me van a tener que dar todo lo de caja son ustedes pedazo de sorete, ahora vas a ver lo que es bueno soberano hijo de mil puta .
El troglodita lloraba como un bebe, mientras me rogaba que no lo mate que tenia hijos y que el no decidía ese tipo de cosas, que el era otro empleado mas que no iba a decirle nada al patrón y que dejaría irme en paz. Empezó a pedir auxilio a los otros empleados de la cocina, pero pasada la sorpresa inicial, todos entendieron lo que iba a pasar y ninguno acudió en su ayuda .Miraron la escena con aprobación silenciosa, mientras el fulano se desgranaba en puteadas y llantos .
Fuimos juntos hasta la caja, yo seguía sosteniendo el pelapapas en su cuello y el imbécil ya estaba orando un padre nuestro. Al llegar allí la cajera se sorprendió, pero al momento me pregunto. Estas seguro de lo que vas a hacer nene? , así es señora le conteste y me lleve10.000 mangos íntegros .
Ahora te toca a vos ruiseñor, le dije al encargado de cocina. Su cuerpo temblaba tanto que parecía que se derretía de miedo, mi corazón era una explosión constante, lo di vuelta lentamente. Juro que nada fue premeditado pero que nada a su vez fue irracional, simplemente fue como si algo ya estuviera inscripto en mi naturaleza, esperando a ser activado. No quiso abrir los ojos cuando aprisione el pelapapas en su pecho.
Desde ese momento no volví nunca más sobre mis pasos. Me cobije en la noche, me transforme en el otro, en el ser más despreciable de la tierra .Aquel cuyo nombre nunca debe ser pronunciado a la luz de los días. Pero esa vez, aunque sea esa única vez, les había ganado la partida…
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